viernes, 21 de noviembre de 2014

LA PRESENTACIÓN DE LA
VIRGEN MARÍA

Hoy queridos hermanos, nuestra Orden se alegra con la memoria de la presentación de la Virgen, nuestra Señora, en efecto, nosotros como siervos de María, nos gozamos cada vez que recordamos algún hecho de los que fueron haciendo de esta gran mujer, la más bienaventurada entre todos los hombres, así lo reconoció al decir: <<muy dichosa me llamaran todos los pueblos, porque el poderoso ha hecho obras grandes por mi>>.
Dios la destino desde el principio y en su suprema omnisciencia sabía muy bien que ella aceptaría la misión que le iba a ser encomendada, pero en ningún momento condicionaría su libertad puesto que como toda creatura, la haría libre en sus decisiones. María, aun así, sin saberse elegida por Dios, como un elemento fundamental para llegar a la plenitud de su Plan de Salvación, desde muy niña se presenta en el templo y se entrega para ser instruida según los preceptos de Dios; es decir, siendo ella muy joven, tal vez de manera inconsciente ya estaba aceptando en su vida la Voluntad Divina y por supuesto, los designios de Dios iban marchando por buen camino.
¡Oh María! Santa Madre nuestra, gracias te damos por tu disponibilidad total a la obra de Dios, preferiste ofrecer toda tu vida a Dios, desde tu infancia y por ese desprendimiento que tuviste, hoy nos podemos alegrar porque por ti, el redentor vino al mundo y nos salvó del dominio del pecado y podemos decir con gran esperanza, al cielo iremos para vivir eternamente contigo, con los ángeles y con toda la multitud de santos y bienaventurados, que por un simple “fiat” tuyo, pudieron y podremos alcanzar la sublime gloria de Dios.


Por: Diego Esteban Zárate, O.S.M

1 comentario:

  1. Que la Bienaventurada Señora eximio modelo del templo del Señor nos siga acompañando en este caminar hacia la vida consagrada y consiga del Señor muchas gracias para todos los fieles de nuestra Iglesia...

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